Este ha sido mi primer invierno, el mas frío de mi vida, aunque, he escuchado que este año no ha sido tan crudo el invierno en Santiago, pero ahora cuando va levantando un poco la temperatura estoy empezando a ver lo hermosa que es la primavera, y es tan hermosa porque después de sentir frío hasta en los huesos y ver como los árboles ya no tienen ninguna hoja el darse cuenta que van saliendo brotes, flores y sentir nuevos aromas en el ambiente, unos tan familiares, tan venezolanos, por eso dicen que Venezuela es el país de la eterna primavera. :)
Ya el Dios va creciendo, llenando de luz los días y parte de las noches, mañana es Ostara, que la Diosa y el Dios nos protejan a todos y nos llenen de su fuerza, su calor y energía. Mil bendiciones!!!